En noches como hoy me siento seria
no quisiera claudicar
no quisiera renunciar a los jolgorios
pero el aire o los murmullos o mi ombligo
se me enredan con un brillo tan solemne
que no puedo romper aguas de chistes
y la risa se me antoja desgastada
son noches más propias de confidencias
de nostalgia, de poesía, de ajedrez
son noches en que entiendo por ejemplo
que me estoy haciendo adulta
que los adioses que duelen
nacen siempre de una bienvenida
noches de pensar en el futuro como una ortiga dulce
o de soñar amapolas en campos de hormigón
hoy me siento empachada de anécdotas
veo cómo se reduce el repertorio
de rostros manos brazos movimiento
y me cubro la mirada de hermetismo
reduciéndolo todo a colores
tan primarios como un mondrian
y es en noches como ésta
que podría entablar eternos soliloquios
sobre el amor la amistad la muerte
el duelo la justicia la esperanza
hasta aburrir a mis propias neuronas
quizás fuera mejor emborracharse
irse a dormir con la cavilación como almohada
entregarse a la danza como un ritual
ahumar los silencios y destellos
pero sigo clavada en mi rincón de gravedad
incapaz de sustraerme a la galaxia
por la que ya hace tiempo que navego
persiguiendo casiopeas y saturnos
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2 comentarios:
Sigo clavada en mi rincón de gravedad...
Muy bonito
1b
Serenamente adulta.
Soñar amapolas en campos de hormigón.
Martín
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