martes, 2 de septiembre de 2008

El Dios que me habéis mostrado

El Dios que me habéis mostrado
tiene los dedos tiernos
como los del padre primerizo
que esculpe su mano para la caricia
-una mano tatuada de nombres
con trazo indeleble.

El Dios que fue tejiendo nuestro encuentro
es un Dios descabellado
un beso todo trenzado de alientos
conspirando contra la certidumbre
haciendo del miedo una guirnalda
que venga a embellecer el desconcierto
o un cosquilleo que nos ría las solemnidades

Nuestro ajado lenguaje quedó abolido
por sus silencios y su Palabra
ahora tan sólo hay presencia de Amor
y hermanos de ella habitados

4 comentarios:

lucia dijo...

"ahora tan sólo hay presencia de Amor
y hermanos de ella habitados"

Que así sea, que así lo hagamos posible aunque parezca imposible, que creamos de verdad y que se plante ese Dios que describes en el corazón y se quede a vivir. así lo pido hoy para mí, porque así lo necesito y veo que me hace falta, y así lo pido para todo el que lo quiera.

Un beso guapa,

Lucía

Rosalía dijo...

Que así sea, aunque de hecho ya lo es, lo que ocurre es que casi nunca nos enteramos, no somos conscientes de qué está hecho nuestro corazón,de Quien mora en nosotros. Tanto nos cuesta mirarnos y dejarnos mirar con ternura... Que nos lo vayamos enseñando unos a otros
Un besote y gracias

Anónimo dijo...

"Esculpir las manos": me has recordado que Dios siente lo mismo que lo que sentí -primerizo- al coger a mi niña.
Hace años un cantautor dijo ser dios en pleno orgasmo. Y protestaron para hacerle callar.
Hoy tú dices ser "un beso todo trenzado de alientos" y te digo "no calles, Rosalía,habla, habla".
Recordando el EAC, "en lo cotidiano, en lo próximo, en el prójimo -EN TODO.
Gracias hermanita.
P.D:
Hay un pequeño error en las últimas lineas.

Xancin dijo...

Ei, soy Xan, de Taizé, de esos que inspiraron este hermoso poema. Que bonitooo, muchas gracias y gracias por este blog